Por quinta noche consecutiva en este fin de semana de Carnaval, se registraron en distintas zonas de Río de Janeiro fiestas clandestinas y multitudes de personas sin tapabocas, a pesar de los esfuerzos de la ciudad para tratar de prevenir estos eventos donde hay aglomeraciones.
Muchas de las fiestas se extendieron durante toda la madrugada y continuaron a la mañana siguiente, como sucedió en las de este martes.
Una de ellas se desarrolló en un restaurante-club en lo alto del Morro do Vidigal, en la zona sur, según consignó el portal local G1. A las 6:30 de la mañana, cientos de personas seguían amontonadas en diferentes pistas de baile.
Desde principios de año, estos espacios han sido prohibidos por la Ciudad de Río, y los clubes nocturnos solo pueden trabajar con clientes sentados. En Brasil, el consorcio de medios de comunicación registró en la semana previa un promedio de 1.102 muertes diarias por coronavirus, mientras que Río de Janeiro anunció este lunes que la falta de vacunas impedirá la continuidad de la campaña de inmunización a partir del miércoles 17.