Flavia Zúñiga, es una vecina de Fernández Oro, indicó que desde que le aplicaron la vacuna contra el covid-19 sufre problemas neurológicos.
“Me puse la tercera dosis en abril, mi chequeo anual había sido en marzo-abril y me habían indicado que estaba bien de salud. A los 15 días empecé con mareos, al punto de que no podía ni caminar”, relató.
Flavia contó que la tercera dosis que le pusieron fue la vacuna china CanSino: “La verdad que me ha generado muchísimos problemas. Mi marido dejó de trabajar cuatro mesas para cuidarme porque no podía ni siquiera caminar dos metros. Me hice un montón de estudios para darnos cuenta que fue la vacuna”.