La crisis institucional en Allen, bajo la gestión del intendente Marcelo Román, continúa generando episodios de conflicto. Tras el paro de los trabajadores municipales y la clausura del parque automotor que dejó a la ciudad sin recolección de residuos, ahora se suma una nueva controversia: el ingreso no autorizado de camiones con basura al basural de Fernández Oro.

Según confirmó el intendente orense Gustavo Amati, al menos un camión logró descargar residuos en el predio antes de que se bloqueara el acceso al resto de los vehículos. “No hubo ningún llamado ni acuerdo previo. El segundo camión fue frenado y se prohibió su entrada”, explicó el jefe comunal, quien aclaró que la colaboración con otros municipios requiere de autorización formal.

La raíz del problema en Allen se arrastra desde agosto, cuando el Ejecutivo anunció un cronograma escalonado de pagos que generó un paro municipal que aún persiste. A esa medida se sumó la clausura del parque automotor por fallas de seguridad, lo que derivó en la acumulación de basura en distintos barrios y un colapso sanitario inminente.

Hasta el momento, no está claro si los camiones que llegaron a Fernández Oro fueron contratados por el Municipio de Allen o si se trató de una iniciativa de vecinos que, ante la falta de respuestas, decidieron actuar por cuenta propia. Desde la vecina localidad, ratificaron que no habrá sanciones pero sí controles estrictos para evitar que la situación se repita.