Un bebé de apenas un año y dos meses fue salvado gracias a la rápida intervención de los policías de la Comisaría 33° de Allen. El pequeño se estaba asfixiando y los uniformados actuaron de inmediato, realizando maniobras de reanimación mientras lo trasladaban al hospital, donde finalmente volvió a respirar y quedó fuera de peligro.

El Sargento Edgardo Pereyra, el Cabo Primero Richard Mercado y el Cabo Julio Parada explicaron cómo cada segundo fue clave para evitar una tragedia. Destacaron la importancia de la capacitación constante y la coordinación en situaciones de emergencia para garantizar la seguridad de los vecinos, especialmente de los más pequeños.

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