El abogado Mariano Mansilla, representante legal de la familia de Alison Jofré Calfunao, cuestionó duramente el silencio de los médicos que participaron en la operación que derivó en un trasplante de corazón y la posterior amputación de una pierna. En diálogo con LU19, señaló que “es una discusión más que jurídica, médica” y apuntó contra los profesionales de la Clínica San Lucas por no acceder a reunirse con los familiares: “Era un gesto mínimo de humanidad que debieron tener”.

El letrado remarcó que “a los médicos también hay que citarlos, los enfermeros, los asistentes quirúrgicos, los administrativos, y reconstruir el momento en el que a Alison le dan los dos paros cardíacos”. También fue crítico con el accionar de la fiscalía: “Nos parece que la gente tiene que declarar”. La familia sumó a dos abogados especializados en casos de mala praxis y a un médico consultor para avanzar en la investigación.

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