Una investigación del Juzgado Federal de Bariloche derivó en una investigación por tenencia de material de abuso sexual infantil. En marzo de este año, la policía allanó un domicilio de Cipolletti para buscar drogas pero halló un celular que contenía un registro fílmico con la actividad sexual de una niña de 13 años. Le formularon cargos al supuesto usuario de ese teléfono.
La fiscalía de Cipolletti formuló cargos por el delito de tenencia de material de abuso sexual infantil agravado por tratarse de una menor de 13 años. Expuso en la audiencia que en marzo se hizo un allanamiento que provenía de un juez federal de Bariloche, en una causa por drogas. De todos modos, hallaron un aparato que cuando fue peritado dejó en evidencia material de abuso sexual infantil.
El joven que supuestamente reside en el domicilio y era el usuario de este teléfono hizo su descargo y fue asistido por un defensor particular. La jueza de garantías que condujo la audiencia admitió los cargos y el plazo para la investigación.
Condena por el mismo delito
En otro proceso que tramitó en Cipolletti, la fiscalía y la defensa pública acordaron la realización de un juicio abreviado para otro hombre de la ciudad, acusado por el delito de tenencia, facilitación y distribución de imágenes de abuso sexual infantil.
La investigación se inició con un allanamiento realizado a fines del año pasado, a raíz de la denuncia de la ONG norteamericana National Center of Missing and Exploited Children (Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados – NCMEC). Sus reportes se denominan CyberTipline y a partir de convenios firmados con distintos países, entre ellos La Argentina, detecta los algoritmos utilizados para la pedofilia.
En el caso de Cipolletti se reportó la tenencia de 43 videos que se correspondían con contenido sexual infantil de menores de 18 años de edad, ubicados dentro de las carpetas de almacenamiento de idéntico teléfono celular. En la detección de esos archivos trabajó la Oficina de Investigación de Telecomunicaciones de la Procuración de Río Negro.
Finalmente ante la exposición de la prueba, las partes acordaron la realización de un juicio abreviado con la pena de tres años de prisión en suspenso para el acusado, quien carece de antecedentes. Le impusieron pautas de conducta, entre ellas “no cometer nuevos delitos, en especial vinculados con la temática”. Un juez de juicio de Cipolletti homologó el acuerdo.