El Tribunal de Impugnación (TI) confirmó la sentencia de un Tribunal de Juicio de Roca contra un médico ginecólogo, quien fue condenado a dos años de prisión en suspenso e inhabilitación temporal para ejercer la medicina por el delito de abuso sexual simple del que fue víctima una paciente.
La sentencia condenatoria fue impugnada por la defensa del imputado, que la calificó de “arbitraria”. En su recurso alegó que la valoración de las pruebas presentadas en el juicio no fue “integral” por parte del Tribunal y que el razonamiento para dictar la condena “se ha apartado de la sana crítica”. Planteó que los tocamientos fueron un acto médico, no un hecho violento, sorpresivo e impúdico como dice la sentencia. Y finalmente cuestionó el monto de la pena, al que consideró “desmesurado y arbitrario”.
El hecho investigado ocurrió en noviembre de 2021 en el consultorio que tenía el ginecólogo en un sanatorio de Roca. La paciente asistió a un control ginecológico de rutina pero sufrió tocamientos, gestos y expresiones verbales de claro contenido sexual por parte del médico, quien además intentó retenerla dentro del consultorio.