El presidente Javier Milei recibe por primera vez a los 24 gobernadores del país en el Salón Eva Perón de la Casa Rosada. El intercambio genera expectativas en el Gobierno que lee como “un guiño” al mandatario la asistencia perfecta.
Al término de la reunión habrá una conferencia de prensa del ministro del Interior, Guillermo Francos.
Desde las 12.20, los mandatarios provinciales de todos los colores políticos protagonizan la primera reunión de la era Milei en la que escucharán los lineamientos del mandatario y también expondrán sus pedidos.
Por el peronismo asistieron los gobernadores de Buenos Aires, Axel Kicillof; de Catamarca, Raúl Jalil; de Formosa, Gildo Insfrán; de La Pampa, Sergio Ziliotto; de Santiago del Estero, Gerardo Zamora; de Tucumán, Osvaldo Jaldo; de Tierra del Fuego, Gustavo Melella; de Misiones, Hugo Passalacqua y de la Rioja, Ricardo Quintela.
Dieron el presente también los independientes: Alberto Weretilneck (Río Negro), Rolando Figueroa (Neuquén), Claudio Poggi (San Luis), Claudio Vidal (Santa Cruz), Marcelo Orrego (San Juan), Gustavo Sáenz (Salta), y Martín Llaryora (Córdoba).
Completaron la delegación los opositores de la Unión Cívica Radical (UCR) encabezados por Alfredo Cornejo (Mendoza) junto a Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Leandro Zdero (Chaco), Gustavo Valdés (Corrientes) y Carlos Sadir (Jujuy), y del PRO, Jorge Macri (CABA), Rogelio Frigerio (Entre Ríos) e Ignacio Torres (Chubut).
En la previa, uno de los mandatarios opositores reveló ante la agencia Noticias Argentinas que asistieron para “escuchar” lo que el mandatario tenga para decir y que exigirán “una compensación a la caída del Impuesto a las Ganancias” por lo que barajan la posibilidad de percibir un porcentaje del Impuesto al Cheque.
El Presidente asistió acompañado de una delegación compuesta por la vicepresidenta Victoria Villarruel; la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei; el jefe de Gabinete, Nicolás Posse; el ministro del Interior, Guillermo Francos, y el titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem.
Con el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) y el paquete de leyes en la cocina, el jefe de Estado intentará sumar el apoyo legislativo de todos los bloques para aprobar en el Congreso sus reformas.