Se entregaron los primeros certificados del curso para instaladores fotovoltaicos en Río Negro que organizó la Secretaría de Energía y Ambiente de Río Negro junto a la Universidad Tecnológica Nacional (UTN). Esta formación, que se hizo en forma virtual, es la primera de su tipo en la provincia y se organizó para impulsar la generación distribuida de energía renovable y habilitar profesionales en un sector que está en pleno crecimiento.

Como participaron instaladores de toda la Provincia, la entrega física se realizó sólo con tres de los 16 instaladores que completaron la capacitación y pudieron acercarse a retirar su certificado.

El curso, dictado en forma gratuita de manera virtual a través de la plataforma de la UTN, estuvo orientado a brindar herramientas técnicas y prácticas a los participantes, quienes ahora forman parte del Registro Provincial de Instaladores Habilitados. Esta iniciativa fue financiada por la Secretaría de Energía y Ambiente como parte del compromiso del Gobierno provincial de fortalecer la transición energética en Río Negro, promoviendo el uso de energías limpias y la creación de nuevas oportunidades laborales.

Uno de los instaladores que completó la capacitación, Pablo Sieben, de Río Colorado, expresó su entusiasmo al recibir el certificado junto a su hija: «La verdad, esto era algo que estaba esperando mucho. Necesitaba certificarme para poder seguir trabajando. Me sirvió tanto para crecer como persona como laboralmente. Limamos muchas asperezas porque, aunque llevo siete años en este rubro, siempre quedan cosas que no tenés a quién preguntar. La calidad profesional del curso fue excelente».

Sieben, quien trabaja en JF Solar, una empresa con sede en varias ciudades de la región, destacó la creciente demanda de energía solar, especialmente en sistemas aislados para zonas rurales, que representan el 70% de su trabajo: «Hoy en día, los sistemas solares están en auge. Cada vez más empresarios y particulares buscan soluciones porque los beneficios son evidentes, especialmente en el ahorro en la boleta de la luz. Además, no es una inversión que demore mucho en amortizarse; en dos o tres años ya recuperás lo invertido, y los equipos tienen una vida útil de unos 25 años».

La secretaria de Energía y Ambiente, Andrea Confini, resaltó el impacto de esta primera experiencia y confirmó que el año próximo se llevará a cabo una nueva capacitación enfocada en instalaciones de media tensión: «Necesitamos profesionales capacitados para acompañar el desarrollo de energías renovables en la provincia. Este curso marca un antes y un después, y es el puntapié inicial para muchas más capacitaciones específicas».