En un clima de gran hermetismo, la policía de la ciudad lleva a cabo una serie de allanamientos en busca de un hombre identificado preliminarmente como «David», presunto autor del doble femicidio ocurrido en las 432 Viviendas. Los operativos, que se extendieron a lo largo de la tarde y la mañana siguiente, se centraron en varios puntos de la ciudad, incluyendo un inquilinato en la calle Miguel Muñoz, entre Ituzaingó y Ecuador.
El doble femicidio tuvo lugar el jueves por la noche, cuando Lidia Tapia, de 82 años, y su hija Stella Maris Natalini, de 62, fueron halladas muertas en su departamento. La tragedia fue descubierta por Amalia, amiga cercana de las víctimas, quien había intentado comunicarse con ellas debido a una preocupación por un posible accidente doméstico. Según su relato, en la mañana del jueves escuchó un grito, pero lo atribuyó a un accidente de Lidia, quien tenía problemas de movilidad. Más tarde, al subir al departamento de las mujeres, un hombre que se presentó como “David” le informó que las mujeres habían salido y él se había quedado a cuidar.
Amalia, vecina de las víctimas, fue quien reveló a LU19 que, en la mañana de ese jueves, al subir al departamento para ver si todo estaba bien, alguien le respondió desde el interior: «Soy David, ellas se fueron y yo me quedé cuidando». Aunque en un primer momento no le preocupó, ya que pensó que se trataba del marido de la sobrina de las mujeres, su testimonio resultó crucial para la investigación. Este detalle permitió a la policía comenzar a investigar más a fondo, a partir de la identificación del sospechoso.
A través de cámaras de seguridad y testimonios de los vecinos, la policía logró identificar a un individuo conocido en la zona por sus comportamientos violentos y por frecuentar la vecindad en busca de refugio y drogas. Según las denuncias, «David» sería una persona conflictiva, que frecuentemente regresaba a la zona cuando no conseguía lo que buscaba. Este perfil ha llevado a los investigadores a centrar la búsqueda en este sospechoso.
Aunque las autoridades no han confirmado oficialmente la identidad del presunto autor, diversas fuentes indicaron que los allanamientos continúan en distintos puntos de la ciudad. La policía mantiene un silencio total sobre los avances de la investigación, al igual que la fiscalía, que no ha emitido declaraciones adicionales hasta el momento.
El caso sigue siendo un tema de gran preocupación y angustia para los vecinos de las 432 Viviendas, quienes claman por justicia para Lidia y Stella Maris, mientras las autoridades intensifican sus esfuerzos para dar con el responsable de este brutal crimen.
Imagen Ilustrativa