El Gobierno de la Provincia está llevando a cabo un proceso de optimización de su recurso humano, que abarca tanto a la planta permanente como al personal contratado, con el fin de eficientizar la gestión pública, a través de medidas como: mayor control de ausentismo. 

Desde la Secretaría de la Función Pública se realizó una revisión integral de la planta de personal contratado, cuyos vínculos vencieron el 31 de diciembre pasado. En este marco de un total de 3382 contratos con vencimiento al 31 diciembre, un total de 2.934 fueron renovados por un nuevo período. 

El 13,2% de los contratos no fueron renovados por incumplimientos

De los contratos revisados, el 13,2% (448 casos) no tuvieron continuidad debido a diversas faltas e incumplimientos por parte de los empleados. Estas situaciones fueron debidamente justificadas, y el Estado rionegrino, al igual que en el ámbito privado, tiene la potestad de no renovar el vínculo laboral con aquellas personas que no cumplan con sus obligaciones.

Entre las causas que motivaron la no renovación de los contratos se encuentran sanciones disciplinarias, incumplimientos laborales y ausentismo sin justificación, entre otros motivos que afectaron el desempeño en el lugar de trabajo.

La decisión de discontinuar la relación laboral con quienes no cumplen con sus compromisos no se trata de ninguna política de ajuste del Gobierno Provincial y mucho menos con lo que algunos denominan como “motosierra”, haciendo alusión al achique estatal implementado en otros ámbitos. Por el contrario, se trata de una política de eficientización del gasto público, cuidando los recursos generados por los propios rionegrinos a la hora de pagar sus impuestos.

En tal sentido, el Gobernador Alberto Weretilneck sostuvo que “todos los agentes públicos, desde un empleado hasta el propio Gobernador, nos debemos a quienes nos pagan el sueldo, que son todos y cada uno de los rionegrinos que con sus impuestos contribuyen en ese sentido. Entonces, quienes no cumplen con la tarea para la cual se les está abonando un salario no merecen estar en el Estado”.