Los precios de los agroalimentos se multiplicaron por 3,3 del campo (origen) a la góndola (destino) en junio. Por cada peso que recibió el productor, el consumidor pagó $3,3, un 230% más, según el Indicador de Precios en Origen y Destino (IPOD) elaborado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). La diferencia es igual a la registrada en mayo.
En promedio, la participación del productor explicó el 31,1% de los precios de venta final, cayendo un 9,6% con respecto a mayo. La mayor participación la tuvieron los productores de cebolla (62,5%), mientras que la menor fue nuevamente para los de limón (6,3%).
Respecto a la brecha del campo a la góndola en los productos frutihortícolas, los precios de las 19 frutas y hortalizas que integran la canasta del indicador se multiplicaron por 4,5 veces en mayo, lo que representa un aumento del 7,2% con respecto al mes anterior.
En cuanto a los productos de origen animal, por los 5 productos y subproductos de este tipo que integran el IPOD, el consumidor abonó 2,9 veces más de lo que recibió el productor, un 3,3% menos que en mayo. “Con respecto a la carne de pollo, novillo y cerdo, dado que son productos sustitutos, compiten para acercarle el mejor precio final al consumidor”, señaló CAME.
El limón (15,8 veces), la mandarina (14,3), la carne de cerdo (5,9), la manzana roja (5,9) y la pera (5,6) fueron los cinco productos que presentaron mayor diferencia entre los precios de origen y destino.
“El limón disminuyó sus precios tanto en origen (30%) como en destino (7,8%) y atraviesa una situación crítica desde hace tiempo. Ante la falta de ventas, algunos productores decidieron no cosechar. Es que el precio que pagan las industrias no llega a cubrir los costos de producción”, precisó el informe.
En tanto, el precio de los cítricos dulces disminuyó 45,8% en el origen y no presentó variaciones en góndola.
“El consumo ha caído significativamente y hay un exceso de oferta, dado que ha sido una muy buena campaña en términos de calidad y volumen. A su vez, las industrias no pueden procesar toda la fruta, por lo que se estropea y se descarta, y los precios tampoco llegan a cubrir los costos de producción y de los galpones de empaque”, aseguró CAME.
Cabe recordar que semanas atrás se volvió viral un video en el que un camión volcador descarta una gran cantidad de mandarinas desde su caja a un basural. Fueron al menos unos 8.000 kilos de la variedad criolla que fueron arrojados en la zona citrícola de Chajarí, en Entre Ríos. Esto se debe a que es una fruta perecedera y si no se consume en determinado período se pudre.
“Veníamos bien y las ofertas iban acompañando la demanda en los últimos dos o tres años, por la sequía había un equilibrio. Pero llegaron las lluvias, acompañadas por el receso económico. El poder adquisitivo de la gente se cayó, se desplomó, eso es lo que nosotros notamos, y por lo tanto hay un poco más de fruta pero menos consumo”, afirmó quien difundió el video, Elvio Calgaro, dirigente de la Federación Agraria y ex presidente de la Federación de Citricultores de Entre Ríos.
El precio de la carne de cerdo se incrementó tanto en origen (0,1%) como en destino (3,5%).
Por último, mientras la manzana roja subió al productor (3,6%) y al consumidor (2%), los precios de la pera aumentaron un 2,2% en origen y un 5,1% en destino.