Luego de la buena performance en el último debate presidencial antes del balotaje, el candidato de Unión por la Patria, Sergio Massa, bajó la intensidad de la campaña y se concentró en convencer a los indecisos, sumó apoyos clave y apuntó a conquistar el voto de jóvenes y adultos mayores.
Tras una campaña intensa que lo llevó a recorrer el país en búsqueda de hablarle a todos los sectores sociales durante un extenso recorrido electoral, Massa aprovechó los últimos días para hacer foco en segmentos clave que podrían darle la victoria en un escenario de extrema paridad según anticipan la mayoría de los analistas.
«La elección no se gana hasta el domingo», sostuvo el candidato oficialista al día siguiente del debate durante un acto en San Vicente junto a fuerzas de seguridad, donde eligió el bajo perfil a pesar de la buena evaluación que realizaron desde su espacio respecto de la contienda discursiva contra su rival en el balotaje.
En este sentido, el mismo día que el ministro de Economía estuvo en esa localidad bonaerense se conoció la cifra de inflación, que mostró una desaceleración en el mes de octubre, con un índice que llegó al 8,3%. Lo que representó una buena noticia para tigrense en el último tramo de la elección.
Luego, el postulante presidencial viajó a Río Negro, donde reforzó el mensaje dirigido hacía los indecisos: «De acá al domingo vayan a abrazar a esos que todavía están en duda», dijo en el marco de un acto en General Roca, organizado por su par de Justicia, Martín Soria, y la intendenta, María Emilia Soria.
A su vez, en una semana donde intentó evitar los “actos masivos” y prefirió el “mano a mano” como herramienta principal en el final de su campaña, el titular de Hacienda recibió apoyos clave de cara a la segunda vuelta, primero por parte del ex ministro de Economía, Roberto Lavagna y después el de gobernadores oficialistas.
En tanto, los destinatarios del discurso electoral en el tramo final de la campaña del candidato de Unión por la Patria fueron tres que, desde el oficialismo, consideraron clave seducir camino en la segunda vuelta: jubilados, empresarios y jóvenes.
Para lograr este objetivo, Massa visitó a Magdalena Fanny Córdoba, una jubilada de 104 años que vive en el municipio de Berazategui. El funcionario se acercó con un ramo de flores y una bolsa de bombones hasta la vivienda de su votante más longeva, y luego de ser recibido por la familia completa, desayunaron mates.
Más tarde, el candidato oficialista ratificó sus principales propuestas a horas del comienzo de la veda electoral al exponer en el Consejo Interamericano de Comercio y Producción (Cicyp), donde dejó un mensaje respecto de lo que está en discusión el próximo domingo.
«El pasado ya no se discute más, no estamos discutiendo acá a uno u otro ex presidente. Somos dos los que podemos gobernar desde el 10 de diciembre», señaló Massa, quien además aseguró que quiere ser el presidente que «cierre la grieta» en el país.
El tigrense cerró la jornada en la Escuela Superior de Comercio Carlos Pellegrini, rodeado de estudiantes, similar al encuentro que protagonizó con alumnos del Colegio Nacional Buenos Aires. Lo hizo cara a cara, sin acto masivo ni dirigentes que puedan entorpecer la performance en el último tramo de la campaña.