Con la llegada de un nuevo fin de semana extra largo, la cordillera rionegrina se prepara para recibir visitantes con una propuesta turística difícil de resistir. Bariloche, El Bolsón y Dina Huapi se presentan como opciones ideales para disfrutar de escapadas en contacto pleno con la naturaleza y los colores otoñales que pintan los paisajes de la región.
Bariloche, como siempre, lidera entre los destinos favoritos. Sus postales de otoño invitan a recorrer el Circuito Chico, el Cerro Otto con su famoso teleférico y confitería giratoria, o el Cerro Campanario, donde las vistas panorámicas son sencillamente inigualables. Para quienes buscan algo distinto, la propuesta de viajar en el Tren Patagónico hasta la estación Perito Moreno suma una experiencia única.

El Bolsón, por su parte, se luce en esta época del año con sus senderos teñidos de ocres y rojos. El Camino de los Nogales y el Bosque Tallado en el Cerro Piltriquitrón son dos de las opciones que combinan naturaleza, arte y aire puro. El trekking en los cerros y los recorridos por los paisajes patagónicos prometen momentos inolvidables en familia o con amigos.
Un poco más tranquilo, pero igual de encantador, Dina Huapi ofrece alternativas para quienes prefieren alejarse del movimiento turístico más intenso. Desde paseos en bicicleta por la costanera, hasta caminatas hacia la embocadura del río Limay o visitas a la destilería Madoc, este rincón cercano a Bariloche combina naturaleza, historia y producción regional.