El Fortín pasó de perder la final de la Copa de la Liga por penales a caer en la jornada inicial del certamen más largo que tiene la elite argentina. En la noche del lunes, los de Gustavo Quinteros trastabillaron en el Bosque por 3 a 1 ante un prolijo Lobo del uruguayo Marcelo Méndez.
Técnico que debuta gana fue la máxima que funcionó en 60 y 118. Gimnasia La Plata en una gran contienda y frente a un temible rival, mostró sus armas para cantar victoria. Vélez Sarsfield no acertó las que su oponente sí y allí pudo explicarse gran parte del resultado.
El arranque fue entretenido porque la visita pudo abrir la cuenta en un remate de Braian Romero que dio en el palo y se perdió por línea de fondo. En el costado opuesto, el dueño de casa llegó con una palomita de Pablo de Blasis que se fue cerca del palo derecho de Tomás Marchiori.
Vélez llegó con un derechazo desde la medialuna de Claudio Aquino que tapó Nelson Insfrán y mediante una jugada que le quedó regalada a Thiago Fernández y, de manera inexplicable, la mandó por arriba del travesaño. Cuando más merecían los de Liniers, vino el gol de Gimnasia.
Un córner bastante estudiado le permitió al Tripero colocar el 1 a 0. De Blasis levantó desde la derecha pero abierto para que Lucas Castro, con una pirueta, la ponga en zona candente. Allí, con la rodilla, en el afán de empujarla, Rodrigo Castillo la mandó al fondo de la red del Fortín.
Gimnasia La Plata volvió a ampliar en el arranque de la complementaria. Después de un tiro a colocar de Pablo de Blasis que salió apenas desviado, cayó el 2 a 0 en un gran centro de Benjamín Domínguez que encontró el cabezazo certero de Matías Abaldo para que se torne inatajable para Marchiori.
Vélez pudo descontar en una muy buena jugada de Aquino que enganchó dentro del área grande, dejó desarticulado a Juan Pintado, y metió un derechazo que Nelson Insfrán desvió volando contra su ángulo superior derecho. Y nuevamente, cuando merecía algo, recibió otro revés.
A los 22 minutos de la segunda parte, el Lobo puso las cosas 3 a 0 en un tiro libre sorpresivo de Nicolás Colazo. Sin ángulo, la pelota se fue cerrando, Castro no cabeceó y mareó a Marchiori que la vio meterse contra su parante izquierdo.
Vélez no bajó los brazos, pudo descontar con Alejo Sarco pero lo consiguió con un golazo de Matías Pellegrini que la colgó del ángulo superior izquierdo de Insfrán. Más allá de eso, el triunfo no se le escapó a Gimnasia que se sacó de encima un rival durísimo con un gran 3 a 1 en el Bosque.
