Trabajadores bancarios realizaron este miércoles una asamblea gremial con cese de actividades en las sucursales del Banco Santander de Cipolletti, General Roca y Bariloche, como parte de una medida de fuerza impulsada por la Asociación Bancaria.
La protesta, que se extendió durante dos horas, responde a un conflicto de alcance nacional motivado por despidos, cierre de sucursales y una digitalización forzada que, según el gremio, atenta contra los derechos laborales y la calidad del servicio.
En declaraciones a LU19, el secretario general de La Bancaria de Río Negro, Jorge Rodríguez, denunció que el banco traslada operaciones menores a un millón de pesos a oficinas de Pago Fácil, tercerizando tareas sin condiciones de seguridad adecuadas. Además, advirtió que los traslados compulsivos, como ocurre con empleados de Cipolletti reubicados en Neuquén, afectan la estabilidad de los trabajadores.
Rodríguez remarcó que ya se lograron revertir despidos en Comodoro Rivadavia gracias a la intervención gremial y una conciliación obligatoria dictada por la Secretaría de Trabajo. Sin embargo, alertó que la falta de incorporación de personal, la sobrecarga laboral y la falta de diálogo podrían agravar el conflicto.
Desde el gremio no descartan nuevas medidas si la entidad financiera no da respuesta a los reclamos. También se exige el cumplimiento de las condiciones de seguridad exigidas por el Banco Central para la atención al público con manejo de dinero.