Un nuevo foco de conflicto apareció en el gobierno de Javier Milei. No fue la Corte Suprema, ni la oposición legislativa, sino que son los mozos de la Casa Rosada quienes están en pie de guerra porque les quitaron la posibilidad de hacer horas extras. Hay trabajadores que pese a tener 20 años de antigüedad pasarían a cobrar menos de $200.000.
El portal de TN señaló que con esta medida a varios mozos se les redujo el 58,32% de su sueldo de noviembre y percibieron en el siguiente solo el 41,68%. Varios de los mozos comentaron a ese medio que en menos de un mes pasaron de cobrar $450.643 a $189.271.
Uno de ellos expresó: “No somos lo mismo que el resto. Vamos a laburar todos los días hace años. No nos podemos tomar vacaciones ni nos podemos enfermar porque perdemos las horas extras. En la pandemia fuimos siempre”.
“Hay gente que alquila, que tiene hijos, que no tiene otra persona de la familia trabajando y la dejan con menos de la mitad del sueldo. La mayoría tiene créditos que pagar que planificó en base a lo que venía cobrando. Que nos corten todo porque creen que eso es bueno es grave porque no se dan cuenta del daño que hacen”, agregó.
Los trabajadores de otros rubros dentro de Balcarce 50 reconocen que el servicio de mozo es uno de los rubros más afectados por la quita de horas extras, ya que en su mayoría son contratistas.
Es por eso que este viernes habrá una asamblea presidida por la Asociación de los Trabajadores del Estado (ATE) a las 15 en el comedor de Casa Rosada. La Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), el otro gremio de estatales, no confirmó su asistencia.