Con muchos agradecimientos, y sin muchas definiciones, Javier Milei brindó su primer discurso como presidente electo de la Argentina. Y sobre un escenario se escuchó por primera vez a «La Jefa», el apodo de Karina Milei.
La encargada de la campaña fue quien presentó a Milei, que subió al escenario con un discurso escrito que leyó casi al pie de la letra, solo interrumpido por los cánticos y bromas de su alegre público.
Las dos definiciones más fuertes de un moderado Milei tuvieron que ver con que la Argentina «está en crisis» y que las medidas que tomará serán difíciles de digerir: «No hay lugar para el gradualismo, para la tibieza».
«Sabemos que hay gente que se va a resistir, que va a querer que siga este sistema de privilegios. Les digo lo siguiente: dentro de la Ley todo, fuera de la ley nada», agregó.
La otra cuestión que dejó en claro públicamente es que no piensa en tomar medidas de ningún tipo hasta el 10 de diciembre, día en que asume en la Casa Rosada. De esta manera le respondió a Sergio Massa, quien previamente anunció que haría lo posible para que Milei asuma responsabilidades mañana mismo debido a la situación del país. «Que el Gobierno se haga cargo de su responsabilidad hasta el fin del mandato del 10 de diciembre. Así, una vez finalizado el mandato, podemos avanzar para el bien de la Argentina», aseveró.