Netflix aplicará un nuevo aumento en sus tarifas en Argentina a partir de agosto, con un ajuste cercano al 20% sobre el valor base. El impacto será aún mayor al sumar la carga impositiva local, que eleva significativamente el precio final para los usuarios. El plan Premium superará los $25.800 mensuales, marcando un nuevo golpe al bolsillo en medio de la crisis económica.

La suba llega en un contexto de inflación sostenida y encarecimiento de servicios digitales. Según trascendió, los precios base son de $7.199 para el Plan Básico, $11.999 para el Estándar y $15.999 para el Premium. A estos valores se suman impuestos que elevan el monto en un 61%: IVA (21%), Impuesto PAIS (8%) y percepción del 30% a cuenta de Ganancias.

De esta manera, los precios finales desde agosto quedarán en aproximadamente $11.590 para el Plan Básico, $19.318 para el Estándar y $25.758 para el Premium. A su vez, cada miembro extra costará cerca de $8.048. El ajuste representa el segundo incremento del año por parte de la plataforma.

La combinación de tarifas en dólares con una alta presión impositiva local sigue transformando el acceso al entretenimiento en un gasto cada vez más difícil de sostener para muchos hogares argentinos. Lo que popularmente se conoce como “dólar Netflix” vuelve a ser motivo de quejas y críticas en redes sociales.

Además de Netflix, otros servicios de streaming también han ajustado sus precios en los últimos meses, generando un efecto cascada en los gastos vinculados al ocio digital. En muchos casos, los usuarios comenzaron a optar por planes compartidos o directamente dar de baja sus suscripciones.

La tendencia podría continuar en lo que resta del año si persiste el contexto económico. Mientras tanto, las plataformas buscan alternativas para sostener su base de suscriptores en un mercado cada vez más golpeado por la pérdida del poder adquisitivo.