La rectora de la Universidad Nacional del Comahue, Beatriz Gentile, informó sobre la situación del establecimiento educativo y los problemas económicos que atraviesa, los cuales no permiten un funcionamiento óptimo.
En una ocasión anterior incluso las clases debieron ser suspendidas en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, en General Roca, por falta de calefacción en los edificios, lo cual imposibilitaba el dictado de clases por el extremo frío.
Gentile declara que, a pesar de haber acordado con el gobierno, la Universidad no ha recibido ninguna transferencia desde el Nación. Por ello se ha definido extender una semana más el receso invernal, originalmente de dos semanas, para minimizar gastos como luz, gas, agua.
En la última reunión con el Consejo Superior, la rectora expresó que «se está haciendo lo posible para salvar el segundo cuatrimestre» y evitar que los alumnos y alumnas no puedan seguir cursando.
Desde el establecimiento se está esperando la llegada de la partida de recomposición de gastos de funcionamiento, la cual sería de 270% según el acuerdo con el Gobierno Nacional. Por el momento no se sabe cuándo llegará esta recomposición a todas las Universidades Nacionales, ya que ninguna lo ha recibido a excepción de la Universidad Nacional de Buenos Aires (UBA).
El receso invernal ha sido definido desde el 8 de julio hasta el 26 de julio. De esta forma se espera ahorrar durante tres semanas lo necesario para que las clases continúen normalmente en el segundo cuatrimestre.
La drástica situación de, excepcionalmente alargar las vacaciones de invierno, ha sido tomada para poder analizar los gastos ahorrados y para esperar a si realmente la transferencia de los fondos se efectúa.
Las clases se retomarán normalmente el lunes 29 de julio, acercándose al fin del invierno, lo cual es un punto fundamental debido al gasto que conlleva la calefacción. Además se espera que para ese momento haya novedades sobre el acuerdo con Nación.