En el estudio de LU19 La Voz del Comahue, se llevó a cabo una valiosa entrevista sobre el rol de los cuidadores familiares de personas con discapacidad y deterioro cognitivo. La charla fue encabezada por Ana Rodríguez, referente de la Fundación Calma, junto a la neuropsicóloga Lorena Etcheverry Domeño y Bettina Introzzi, quienes compartieron experiencias, estrategias y reflexiones sobre el acompañamiento a quienes se encargan de cuidar.
El eje central del encuentro fue la pregunta “¿Quién cuida al que cuida?”, una consigna que invita a repensar el lugar de los cuidadores y la necesidad urgente de brindarles herramientas emocionales y prácticas.
Talleres y estrategias para fortalecer el rol del cuidador
Durante la entrevista, las especialistas remarcaron la importancia de implementar talleres específicos para cuidadores, tanto familiares como no familiares, con el fin de:
- Acompañar emocionalmente el desgaste que implica el cuidado prolongado
- Enseñar estrategias de afrontamiento frente al estrés y el agotamiento
- Promover el autocuidado y la salud mental de quienes cuidan
“Muchas veces, el cuidador está tan enfocado en la persona que acompaña, que se olvida de sí mismo. Necesitamos espacios donde también puedan ser cuidados, escuchados y contenidos”, expresó Lorena Etcheverry.
Fundación Calma: un espacio de contención en la región
La Fundación Calma, con sede en Río Negro, trabaja activamente en el acompañamiento de personas con discapacidad y sus familias, promoviendo el acceso a derechos, el acompañamiento integral y el fortalecimiento del entorno familiar.
En conjunto con profesionales como Etcheverry e Introzzi, impulsan iniciativas que permiten crear redes de apoyo y capacitación para cuidadores, reconociendo el rol fundamental que cumplen en la vida de quienes atraviesan situaciones de dependencia.
La visita a LU19 sirvió para visibilizar una problemática muchas veces invisibilizada: el desgaste de quienes cuidan. Desde la Fundación, insisten en que cuidar no puede ser una tarea solitaria, y que el acompañamiento debe ser colectivo y sostenido.