El periodista Pedro Brieger pidió disculpas, tras las numerosas denuncias públicas de acosos sexual en su contra: «Lo que describen existió», reconoció el analista internacional, quien además aseguró que en los últimos años hizo «un acompañamiento terapéutico prolongado» para modificar estas conductas abusivas contra periodistas, alumnas, docentes, una secretaria de la Universidad de Belgrano y hasta una vecina del edificio donde vive.

«Quiero decirles que escuché el mensaje de Periodistas Argentinas y rápidamente les hice saber mi deseo de hacer públicas las disculpas. Por eso, en primer lugar, quiero pedir perdón», afirmó Brieger en un video que publicó en su cuenta de X (exTwitter).

Lo hizo 19 días después de la publicación en esa misma red social de una investigación periodística de este cronista, con los primeros cinco casos de acoso sexual, junto con su respuesta; y la posterior presentación de 19 denuncias en su contra que reunió Periodistas Argentinas, cuyos casos fueron presentados nueve días despúes por esa organización en el Senado, junto con la mayoría de las mujeres acosadas por Brieger.

El mensaje de Brieger significa, además, un cambio de posición del mismo Brieger, ya que el 12 de marzo pasado había negado los hechos y amenazado con denunciar al periodista que sacó a la luz los primeros cinco casos de acoso sexual.

«Sé que lastimé a mucha gente. Pido disculpas a cada una de ellas por mis actitudes inapropiadas. Me hago cargo, me arrepiento y hago públicas mis disculpas. Hace muchos años hubo un quiebre en mi vida y dejé de tener conductas que no eran respetuosas. Gracias a un acompañamiento terapéutico prolongado lo pude superar y hoy soy otra persona», sostuvo en el video.

Y agregó: «La que describen existió, pero hace mucho tiempo que no existe más. Por este motivo, quienes hoy trabajan conmigo en diversos ámbitos, se asombraron al enterarse de actos impropios de mi parte en tiempos pasados».

«Me pongo a disposición de Periodistas Argentinas y otros organismos, para intentar ayudar de la manera que lo consideren conveniente, con el objetivo de que esta clase de actos no se produzcan más. Espero que puedan aceptar mi ayuda. Como hace tiempo que ya no soy esa persona, espero que mi testimonio hoy pueda servir también para romper los pactos que existen entre hombres para tapar nuestras conductas dentro y fuera del periodismo. Y estoy dispuesto a colaborar para que así sea. Reitero: pido perdón a quienes ofendí y afecté», concluyó su video de 80 segundos Pedro Brieger.

Su respuesta orientada a Periodistas Argentinas fue porque esa organización presidida por Nancy Pazos presentó un informe el 2 de julio pasado titulado «La cultura del acoso: punto y aparte», donde estuvieron la mayoría de las mujeres acosadas por Brieger. Allí, entre otras propuestas para terminar con la cultura del acoso, le pedían a Brieger que se disculpara por la sucesión de acosos sexuales que produjo en los últimos 30 años.

«Consideramos imprescindible también que Pedro Brieger pida disculpas públicas a las afectadas. Nuestro objetivo y nuestro compromiso es organizarnos y abrazarnos hasta lograrlo», concluía el informe presentado por Periodistas Argentinas.

Ahora Brieger intenta cumplir con ese pedido, al pedir perdón y disculparse. Pero en su video afirma cosas que no se corresponden con la realidad de los últimos meses, cuando en marzo pasado había negado todos los hechos y había amenazado con iniciar acciones judiciales a este cronista, al diario y a las fuentes que lo acusaban de ser un acosador sexual.

Además, aunque el periodista aseguró en su descargo que los hechos ocurrieron «hace muchos años», una de las denuncias en su contra es de 2019, de la periodista Julia Kolodny, quien debió renunciar a su trabajo como columnista en su programa en Radio 10 por estas situaciones.

Periodistas Argentinas difundió este viernes un comunicado en el que destacó que lograron, «en pocos días, que Pedro Brieger pasara de negar y amenazar a las denunciantes, a reconocer públicamente todos los hechos y pedir disculpas».

La organización de periodistas repasó todas las acciones desplegadas en los últimos días, en relación con este caso, tras la presentación del informe en el Senado.

Y concluyó con que, ahora «son las afectadas a quienes les corresponde pronunciarse sobre esto y lo harán si lo consideran oportuno y en los tiempos que requiere la elaboración personal y colectiva: respetémoslos».

Qué respondió Brieger en marzo pasado, en su única respuesta anterior cuando se lo consultó por cinco casos de acoso sexual.
En marzo pasado fue la primera vez que Pedro Brieger respondió a las acusaciones de acoso sexual, en el marco de una investigación periodística.

Este fue el diálogo que tuvo este cronista con Pedro Brieger. El primer mensaje enviado, a través de Whatsapp fue el 8 de marzo pasado:

-Hola Pedro, acá Alejandro Alfie, periodista de Clarín. Estoy escribiendo una nota sobre acusaciones de acoso sexual que te hicieron tres colegas periodistas, además de otras dos situaciones similares. Me gustaría poder consultarte sobre eso. ¿Cómo lo ves?

-Hola Alejandro, discúlpame, recién pude ver bien tu mensaje -respondió Brieger, dos días después-.

-Hola Pedro, lo primero que tengo que pedirte es que si yo te digo cuáles son los casos, vos no entres en contacto con esas personas, porque ellas hablaron conmigo para publicar esa nota, pero ya no quieren volver a tomar contacto con vos, para no ser revictimizadas, así que esa sería la primera cuestión. Si estás de acuerdo con eso, podemos organizar para hablar mañana y así te puedo consultar todo -le respondió este cronista-.

-Ok -respondió Brieger-.

-Te llamo mañana a las 11? O preferís que hablemos más tarde?

-Mándame un mensaje a las 11 -respondió Brieger-.

-Ok, perfecto -le respondió este cronista-.

Y al día siguiente le preguntó:

-Hola Pedro, después que publiqué la nota sobre el juicio laboral que tenés contra Radio Nacional y la TV Pública, en octubre pasado, conocí el caso de Cecilia Guardati, la periodista que trabajaba en Télam, quien me contó que había sido acosada por vos, en un viaje a Túnex, varios años atrás, cuando fueron a cubrir una gira de Cristina Kirchner y vos estabas como corresponsal de la TV Pública. La entrevisté para que me cuente en forma detallada su acusación. Luego hablé internamente en el diario, para ver qué hacer con esa acusación, y me dijeron que siguiera investigando, a ver si surgían nuevos casos. Logré hablar con otra periodista, que me dijo que por esa misma época te había ido a entrevistar a la radio AM750, en el Centro Cultural Caras y Caretas, donde la colega asegura que vos te masturbaste mientras ella te hacía la entrevista, pese a que ella te pedía que no lo hicieras. Ambos hechos ocurrieron entre 2008 y 2010. También hablé con otra periodista, que me dijo era tu columnista de género en Radio 10, en 2019, que trabajó seis meses con vos, pero que tuvo que renunciar a ese trabajo porque todo el tiempo estabas cargoseándola, diciéndole cosas y acosándola en el ámbito laboral… y ella no quería saber nada con vos, así que tuvo que renunciar para no seguir siendo sometida a esa situación. A esos tres casos, se suma lo que dijo Agustina Kampfer en un programa de televisión, en 2011, que contó que ella era tu alumna y vos en el aula la agarrabas del brazo y le decías que era muy linda… y le mirabas los pechos y la entrepierna, de manera insistente… poniéndola en una situación que a ella la incomodaba… y que lo mismo hacías con otras alumnas. El quinto caso sobre el que te quiero consultar ocurrió en la Universidad de Belgrano, donde vos eras docente y me dicen que unos años atrás que esos casos tuviste que renunciar cuando empezaron a hacer un expediente por acosar sexualmente a una secretaria que trabajaba ahí. Estos son los cinco casos sobre los que te quiero consultar, para tener tu opinión sobre esas situaciones.

Pedro Brieger respondió, ese 12 de marzo: «Hola Alejandro, realmente me llama mucho la atención tu whatsapp. Lo que planteas de ninguna manera ocurrió. Mi vida fue, es y será pública, soy periodista. Quedate tranquilo que yo no tengo contacto ninguno con las personas que mencionas y menos por cosas que no ocurrieron. Entiendo que tengan que desviar la información hacia cualquier barbaridad para tapar la inseguridad y la economía del gobierno. Te adelanto que de persistir en la difamación, tendré que recurrir a un abogado para denunciar a tus fuentes, a vos y al diario y reclamarle me indemnicen los perjuicios que me generen por difundir acusaciones falsas de semejante gravedad. Si de todas maneras te obligan a publicarla, hagan como quieran porque la verdad siempre se impone. Saludos».

-La respuesta fue: «Hola Pedro, la verdad es que yo como periodista recibí esos testimonios y te consulté, que es lo que haría cualquier periodista ante una acusación semejante. Te conté cada uno de los casos y pedí tu opinión sobre esas situaciones. Lamento mucho que digas que vas a recurrir a un abogado para denunciarme a mí, a mis fuentes y al diario. Pero eso es algo que me excede. Saludos».

No hubo ninguna respuesta de Brieger a ese mensaje.

Pero todo cambió luego de que este cronista revelara en la red social X (exTwitter) esos primeros cinco casos y la respuesta de Brieger, el domingo 23 de junio. Al día siguiente lo sacaron del aire en C5N y Radio 10. Pocos días después, se ausentaba de su último teórico como titular de la cátedra de Sociología de Medio Oriente, en la Facultad de Ciencias Sociales (UBA), donde se activaba su protocolo de género; y ese sábado 29 de juio, Eduardo Aliverti anunciaba que ya no saldría más en su programa en radio La Red.

A partir de la publicación de esta investigación en X (exTwitter), varias mujeres acosadas por Brieger sumaron sus testimonios, se organizaron y Periodistas Argentinas logró reunirlas y recopilar en 10 días 19 casos que se presentaron el martes 2 de julio en el Senado, en un informe titulado La cultura del acoso: punto y aparte, donde estuvieron la mayoría de las mujeres acosadas por Brieger.

Clarín lo volvió a consultar ese día, cuando Periodistas Argentinas presentó su informe en el Senado. Pero ahí Brieger eligió no responder. Hasta que este viernes publicó un video de 80 segundos, pidiendo disculpas, diciendo que hace mucho tiempo ocurrieron los hechos, que había cambiado y que ya no era esa misma persona que hace un tiempo atrás.