En una audiencia realizada en la jornada de hoy, la Fiscalía pidió que se declare culpable a un hombre de los delitos de homicidio y robo agravados, dos hechos que admitió haber protagonizado en el marco de un procedimiento abreviado acordado con la Defensa Pública penal. Además el juez de juicio, que ya adelantó que aceptará los términos planteados, prorrogó la prisión preventiva.
El sustento probatorio que se había reunido en el marco de la investigación penal preparatoria de ambos hechos, permitió a las partes avanzar en un abreviado parcial, en el marco del cual se solicitó la declaración de responsabilidad penal del acusado para avanzar luego en la discusión de la pena pretendida.
Ello se conversó en primer término con la familia del joven que murió y con el hombre damnificado por el robo. De manera simultánea el defensor penal le explicó a su asistido los alcances de este procedimiento reglado por el Código de procedimiento de Río Negro en su Artículo 216.
En la instancia, la Fiscalía describió ambos hechos y el sustento probatorio con el que cuenta para responsabilizar al acusado. El primero de ellos se produjo el 13 de noviembre pasado a las 14:30 horas cuando el acusado golpeó a un joven, lo amenazó de muerte y cuando éste se retiraba le efectuó varios disparos con un arma de fuego que acabaron con su vida.
Este episodio fue reconstruido por la Fiscalía a través de testimonios recabados, muchos de ellos a través de entrevistas a testigos protegidos que vieron la situación en forma directa o escucharon desde sus viviendas ubicadas en el barrio Ceferino, las amenazas previas y luego la persecución y los disparos.
Sumó a ello los resultados de la autopsia que además de certirficar la causa de la muerte constató lesiones en el cuerpo de la víctima. De la investigación participó el Cuerpo de Investigación Judicial, agentes y las áreas técnicas tanto de la Policía de Río Negro como del Ministerio Público.
Ese hecho fue unificado con otro de robo, perpetrado el 5 de diciembre por el mismo imputado que, tal como lo acredita la propia víctima e imágenes de cámaras de seguridad, fue quien ingresó a una vivienda ubicada en calle Laprida y, tomando del cuello a su propietario, le exigió que le entregue dinero.
El robo contó con la participación de un hombre que se quedó en la calle para alertar y otros dos que se encontraban adentro de un auto. En ese vehículo huyeron los cuatro, pero luego de una persecución iniciada por un eventual testigo a la que se sumó la policía, pudieron ser detenidos.
La calificación legal que la Fiscalía endilgó a ambos hechos es la de homicidio agravado por uso de arma de fuego y robo agravado por uso de arma cuya aptitud para el disparo no pudo ser acreditada, en poblado y banda.
A su turno el defensor oficial aceptó el acuerdo y finalmente tomó la palabra el imputado que reconoció haber sido quien cometió los dos hechos. Luego de ello el Juez de Juicio adelantó que aceptaría el acuerdo y, a pedido de la fiscal, prorrogó la prisión preventiva hasta que la pena quede firme.