Por Nicolás Bustamante
Javier Milei estaría trazando una estrategia inédita hasta el momento para intentar recuperar las Islas Malvinas: aliarse con Estados Unidos y ayudar a la OTAN con objetivos a corto plazo para que luego sus países miembro gestionen frente a Gran Bretaña la entrega de las islas.
El periodista Claudio Jacquelin, de La Nación, sugirió que desde el Gobierno afrontan este nuevo plan con el apoyo de Washington. Y para ello Argentina debe realizar «gestos» que vayan más allá de recibir a los comandos de los Estados Unidos en Argentina o que la banda del Ejército toque el himno de ese país en Ushuaia.
Primer gesto. El ministro Petri va a plantear el próximo fin de semana, cuando viaje a Dinamarca, que Argentina sea «socio global» de la Alianza del Atlántico Norte. En la región solo Colombia es socio global de la OTAN en la actualidad. Esto implica que Argentina ofrecerá y recibirá información privilegiada para ayudar a la coalición en sus objetivos.
Segundo gesto. En el corto plazo se espera que Argentina cumpla con el pedido del presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, quien le pidió a Milei dos helicopteros rusos MI-171 que aquí se usaban para la campaña antártica y municiones. El presidente argentino no respondió oficialmente al pedido, pero siguen las negociaciones.
Estaba previsto que en junio Milei visite Kiev y se encuentre con Zelenski por segunda vez, luego de que el mandatario ucraniano llegara a la Argentina para la asunción del presidente libertario. No obstante todavía no está confirmado ese encuentro.
Por lo bajo comienza a circular la idea de que esta cooperación de Argentina con Ucrania a través de Dinamarca y Estados Unidos (todos aliados militares de Gran Bretaña) le sirva a Milei para empezar a acercar posiciones con la intención de recuperar el territorio de las Islas Malvinas por la vía diplomática.